Camaguey, Cuba, abril -Durante los primeros meses del año, los camagüeyanos sólo han recibido seis veces lo que el gobierno denomina "proteínas de algún tipo", lo que se traduce en mortadella y picadillo, que nadie sabe con qué tipo de carne se elaboran.
Sumadas las cantidades, los agramontinos han recibido, cada 28 días, entre 5 y 8 onzas de los mencionados alimentos. Y por si fuera poco, la oferta de huevos se limita cada vez más: 5 ó 6 por persona cada 28 días.
Esta situación aumenta el descontento de la población, y algunos ciudadanos comienzan a utilizar fórmulas culinarias probadas en los años 90, en pleno período especial. Por ejemplo, aumentar la tortilla agregándole pan y viandas. También puede verse en la mesa de los camagüeyanos los conocidos fricasés de viandas, a falta de carne, y algunos han regresado al picadillo de cáscara de plátano.
Se trata -aseguran- de volver al pasado y de resolver a como dé lugar. (Fernando Tabares/Cubanet)
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